Los Principios de Diseño son un conjunto de consideraciones que forman la base de cualquier producto desarrollado para AIEP.
Para crear experiencias digitales con acceso universal, consistentes y escalables, definimos estos 8 principios que nacen de AIEP a partir de una experiencia digital flexible e inclusiva centrada en las personas, desde su distintos roles, ya sean prospectos que navegan por primera vez una Web de AIEP, alumnos, ex-alumnos, profesores y colaboradores que ya están habituados a la marca. Estos 8 principios para diseñar soluciones y productos digitales son:
Como muestra este diálogo, el principio Evidente distingue entre texto, título, chips, botones terciario y primario.
El usuario distingue fácilmente los diferentes componentes, zonas interactivas,
la
correlación de acción y respuesta, la información y las instrucciones.
El feedback hacia el usuario debe ser claro y directo en sus interacciones, los
contrastes y los diferentes comportamientos interactivos que permiten entender
claramente que es clickeable y que no.
Por otro lado, este principio también implica el feedback que los usuarios
obtienen
al
completar un formulario y los errores que surgen al incluir información errónea.
Con el uso correcto y efectivo de:
El titulo del proceso de admisión junto a la etiqueta del botón Primario ejemplifican el principio Motivante.
No transmitir una venta explícita ni forzada en textos, en CTA, botones o
fotografías, sino que el objetivo es una consecuencia del contenido y navegación
expuesto.
La redacción de las acciones y llamados son dedicadas y personales, es decir, le
hablamos a una persona, por ejemplo: “Inicia tu Admisión”.
Con el uso correcto y efectivo de:
La consistencia de los accesos donde sea que se ingrese, generarán la confianza de una plataforma establecida.
Un Sistema de Diseño que transmite cercanía y a su vez una institución consolidada y confiable. Para eso nos basamos por un lado en los principios educacionales estándares de McKinsey y por otro lado la seguridad en las transacciones y en los accesos. Como también el derecho a entender la información y navegación.
Con el uso correcto y efectivo de:
Un sistema que utiliza pasos que se reconocen e identifican fácilmente, guiarán intuitivamente al usuario.
Diseño claro, fácil, simple de acceder, interactuar, orientarse y comprender.
Uso de elementos correctamente, basándose en los principios básicos de diseño, y
por otro lado convenciones sociales de interacción. Desde los menús
desplegables, los pasos, las zonas interactivas, etc.
Este principio tiene como finalidad considerar soluciones de interacción comunes
y ampliamente utilizadas, desde Spotify, Netflix, hasta las jerarquías
tradicionales en Web.
Con el uso correcto y efectivo de:
Al lado izquierdo tarjeta formato vertical y al derecho tarjetas horizontales. Jerarquías en títulos, chips y acciones.
Se identifican los elementos principales fácilmente, logrando acceder en todo momento. Algunas convenciones pueden ser adoptadas para facilitar la comprensión “logica” al momento de ir descubriendo la información y las funcionalidades que la plataforma permite realizar.
Con el uso correcto y efectivo de:
Lado izquierdo versión lumínica de la interfaz, Versión derecha activado modo oscuro, para evitar el desgaste ocular.
Experiencia basada en diseño universal que permita la autonomía de navegación
para el mayor número de usuarios posibles.
Estas funciones universales permiten, desde un comienzo, pensar en los
componentes en sus estados más primitivos. En el caso del color que nos permite
la jerarquía, al eliminarlo perdemos esa comprensión, como el modo de visión
neutra o alto contraste (blanco y negro) para personas con capacidades
diferentes. Por lo tanto, desde un comienzo definimos la jerarquización con
otras cualidades que el diseño nos permite.
Con el uso correcto y efectivo de:
La adaptación del menú en tabletas y teléfonos según una navegación común y clara para diferentes usuarios.
No sólo la adaptación de los contenidos en puntos de quiebre según el
dispositivo, si que tambien el diseño enfocado en los usuarios permitiendo una
adaptación de funciones y accesos, es decir, lo que no necesita o no es para ese
usuario, no aparece.
La experiencia se adapta al usuario y no al revés, con una experiencia
customizada dependiendo del tipo de usuario (centrado en su actividad).
No tiene un exceso de información que no necesita y a su vez desmotiva.
Con el uso correcto y efectivo de:
Feedback constante para el contexto del usuario en la interacción y navegación. En este caso el menú denota su ubicación.
Control del usuario que sabe dónde se encuentra y permite volver e ir donde él quiere de una manera simple, rápida y accesible. Desde las migas de pan, hasta un menú universal de todo el ecosistema de AIEP, hasta la arquitectura de información organizada de una manera consistente.
Con el uso correcto y efectivo de: